Blogia
Dr. MEIR FINKEL, Ph.D.

PENSAMIENTO COMPLEJO

PENSAMIENTO  COMPLEJO

El pensamiento complejo viene a renovar la forma en que se enfoca la investigación a raíz de una nueva realidad que impera en el planeta Tierra. Un planeta cuya población supera los seis mil millones de habitantes, sus recursos naturales han sido explotados desmesuradamente y descuidados repercutiendo en el medio ambiente, creando un hábitat contaminado tanto en su naturaleza como cómo en los aspectos socioeconómicos que se evidencia en una profunda crisis caracterizada por la pérdida de valores humanos y valores económicos.

Hasta mediados del siglo veinte la población mundial era la mitad de la actual, la naturaleza era respetada por los actores de la era industrial aunque protagonizaron dos grande guerras con consecuencias nefastas impulsó el avance de la ciencia al encontrarse inmersos las partículas más pequeñas que componían los elementos químicos que la misma ciencia había clasificado en la tabla periódica.

Desde Isaac Newton (1643-1727) hasta Albert Einstein (1879-1955) el método científico utilizaba los pensamientos heredados desde tiempos de René Descartes (1596-1650) reduciendo los fenómenos observados a su mínima expresión, simplificando experimentalmente la materia a sus componentes básicos, fragmentando el pensamiento por medio de la especialización, mutilando el conocimiento, mirando la realidad en forma unidimensional y separando las mediciones cuantitativas de las explicaciones cualitativas. Existía un clara separación entre las ciencias naturales y las ciencias humanas, de ahí que por mucho tiempo, incluso en la actualidad se reconocen, las primeras como ciencias duras que estudian la física, la química y la biología por medio de un lenguaje matemático, y las segundas como ciencias blandas que estudian la antropología, la psicología y la sociología utilizando el lenguaje lingüístico.

Este paradigma de la ciencia clásica fue cuestionado por Karl Popper (1902-1944) y Thomas Samuel Khun (1922-1996) quienes disentían de las ideas, nociones y conceptos propugnados por los científicos que los precedieron, causando una verdadera revolución en las ciencias que debilitó la barrera que separaba las ciencias duras de las blandas, situación que causó la renovación del pensamiento científico con el efecto de la resignificación de los conceptos de lo simple y lo complejo.

De repente, la ciencia que tradicionalmente se encargaba de disipar la complejidad de los fenómenos, a fin de revelar el orden simple que obedecen, empezó a concebir los fenómenos tomado en cuenta particularmente entorno humano y el contexto planetario en que se daban los fenómenos, y en general tomaron en cuenta la naturaleza de la Tierra y la realidad del Universo, situación que debilitó aún más la ya porosa frontera que separaba las ciencias naturales de las ciencias sociales al introducir múltiples dimensiones a sus estudios e investigaciones científicas.

Al derrumbarse el pensamiento cartesiano de la ciencia surgió el pensamiento moriniano de la complejidad integrando el pensamiento tradicional de la ciencia a una nueva manera de pensar en forma abierta y dinámica tomando en cuenta el sistema en su totalidad en forma orgánica, caracterizada por la indisociabilidad de las partes como requisito para conocer, medir, explicar y comprender desde todas las perspectivas posibles los vínculos que constitución y ponen en acción el nuevo paradigma de la complejidad, que Edgar Morin la define como un fenómeno cuantitativo, una cantidad extrema de interacciones e interferencias entre un número muy grande de unidades.

Los principios epistemológicos de la complejidad se remontan a sus orígenes con la palabra "complejo" que aparece en 1625, con su variante "complexo", que su vez viene del latín "complexus", que significa "que abarca", participio del verbo "complector" que significa yo abarco, abrazo. De complejo se deriva complejidad y complexión. Por otro lado esta última palabra, que aparece en el castellano alrededor del año 1250, proviene del latín "complexio" que significa ensambladura o conjunto.

La complejidad, es a primera vista un tejido de constituyentes heterogéneos inseparablemente unidos, que presentan la paradójica relación de lo uno y lo múltiple. La complejidad es efectivamente el tejido de eventos, acciones, interacciones, retroacciones, indeterminaciones y azares aunados por la perplejidad de lo impredecible, desordenado, caótico, heterogéneo, incierto e inacabado que constituyen el mundo fenoménico. Esta complejidad es el método que utiliza el pensamiento complejo para conocer, medir, explicar y comprender la realidad humana, social, natural, ecológica, planetaria y universal.

Por tratarse de un pensamiento no puede separarse de los humano por radicar en la mente humana, y por lo tanto se tienen que tomar en cuenta nuevos elementos que produce la complejidad (complexus) como la perplejidad (perplexus) del espíritu humano, un estado "implexo" que se parece a una excitación producida por algo sorprendente e inexplicable provocando por la libertad y creatividad de los seres espirituales que tienen la capacidad de sentir, percibir, reaccionar, hacer, comprender, resistir y recomponer sus habilidades y maniobrar sus pensamientos en la búsqueda de nuevas estrategias trascendentales frente a lo real.

El Pensamiento Complejo renueva la conexión de los conocimientos mediante la aplicación de sus criterios críticos fundamentados en principios generativos y estratégicos de su método dinámico y complejo. Estos son: principio sistémico u orgánico, principio de la autogeneración vital auto-organizativa, principio hologramático, principio de retroactividad, principio de recursividad, principio de autonomía-dependencia, principio dialógico y principio de reintroducción del cognoscente en todo conocimiento.

En la medida que se profundiza en el pensamiento complejo queda al descubierto su característica inacabable al surgir nuevas ideas, nociones y conceptos a desarrollar, por lo que finalizo en este punto mis reflexiones sobre este fascinante tema, no sin antes dejar abierta la posibilidad de continuar indagándolo para volver a retomar la cuestión y plasmar nuevas reflexiones a raíz de los nuevos descubrimientos y hallazgos en esta materia científica.

0 comentarios